La entrada de hoy es para mostraros que aporté yo a la expo entre bonsáis, kusamonos, mesas y lajas. Tenía que llevar además un carpe de Mada que quería exponer pero está de vacaciones y lo tengo yo de acogida temporal en casa.
El viernes me dediqué a preparar todo lo que tenía que llevar y cuando vi el espacio que ocupaba me preocupé.
Josean esta vez me mataba, tendría que hacer tetris.
Y ahí faltan las cajas con las mesas y demás complementos.
Una vez montado todo tal y como había preparado el planning de la expo, me puse a colocar lo mío, casi con todo terminado, hubo que hacer algún cambio de última hora.
En el photocall que montamos como bienvenida y como ya habéis visto, había una Fagus Crenata impresionante puse un papirus mini en una maceta de Martín.
Al igual que el año pasado, para separar zonas y sobre todo, rellenar el espacio disponible, teniendo en cuenta que exponíamos sólo 12 socios de 27, usamos peanas divisorias, en las que colocamos kusamonos y algún suiseki. Os voy poniendo las cosas en el orden en el que se debía ver la exposición.
En la primera peana coloqué una bola de musgo mía con una Imperata cilindrica "red baron" y una Fragaria indica, sobre una laja de pizarra.
Nadie quería estar en los primeros sitios porque según ellos son los que menos ven los visitantes, así que coloqué mis presentaciones.
En la primera y la única que tenía pensado llevar, si más socios hubieran participado, el carpinus coreánica, la premna japónica y una fragaria indica.
La segunda, el buxus harlandii, con el juniperus procumbens y de acento una saxífraga paniculata en maceta de Martín.
En la siguiente peana de separación, la heuchera en maceta de Martín, gustó muchísimo, todo el mundo preguntaba.
Mada, como ya he dicho, se encuentra en Viena de vacaciones, quería exponer su carpe y me lo traje a casa, el resto de la presentación es todo mío. Carpinus Betulus, con azalea Satsuki en maceta de Martín y de acento un sedum
Jonathan expuso su acer palmatum y le presté una siempreviva que conocéis de sobra, regalo de Martín, la maceta también es de él, la laja de madera es mía.
Toño expuso su cedro y le presté un kusamono, la planta regalo de Lourdes y la maceta de Martín.
También expuso Toño su pino silvestre y le dejé un helecho que tengo puesto en la maceta que me regaló Angel.
Y cerrando la exposición, en la última peana que tampoco quería ocupar nadie con algo suyo por si alguien tenía tentaciones de llevárselo, de nuevo algo mío, otra imperata cilindrica en maceta, como no, de Martín.
Hubo algunas mesas y lajas más, repartidas por la expo. De hecho en casa de todo lo que tengo solo se quedó una mesa. Ya les he dicho que no cuesta tanto ir pensando que se va a necesitar al menos con unos meses de antelación, que tener un kusamono o dos no ocupa lugar y que hay mesas muy caras pero también las podemos encontrar muy baratas, que no exponemos en la kokufu. Una cosa es llevar una o dos cosas de más y otra llevar más de la mitad para dejarlo a los demás, y menos mal que Ana llevó también algunos kusamonos extras.
Había dicho que no iba a llevar mas que lo justo y dos o tres cosas extras pero como quiero que las cosas queden bien al final voy siempre cargada. Llegué a casa agotada y un poco cabreada, tampoco es tan difícil intentar hacer las cosas bien, sobre todo cuando te las dan masticadas.
Sé que algunos socios no exponían porque no podían, pero de esos 15 que no expusieron gran parte fue porque no quisieron. Había decidido que este año no le insistiría a nadie si ellos decían que no, era no, si alguno estaba esperando que le suplicara su participación se equivocó. Y así otros socios que realmente no podían exponer realmente, viendo el panorama hicieron algo más que un esfuerzo para estar presentes.
No entiendo a los que no quieren exponer, no es un evento nacional es una exposición de asociación para que los visitantes puedan ver que el bonsái no es tan elitista como muchos se piensan, se trata de hacer esta afición más conocida, pero al final con no exponer cosas sencillas consiguen el efecto contrario, cargar de trabajo a otros y que se expongan árboles impresionantes que a los visitantes profanos les parecen imposibles de cuidar.
Y luego están los que piensan que hay que exponer sólo árboles que hayan pasado una selección, pero estamos locos?, somos una asociación, y es la exposición de todos los socios. Que no estamos hablando de exponer en Alcobendas o la Niemeyer, que ahí querría yo ver a algunos.
Olvidan que exponer un bonsái no es colocarlo sin más encima de un mantel y ya habrá alguien que me deje lo que yo necesito y lo siento una cosa es que entre unos y otros se cambien mesas o kusamonos para poner las más adecuadas con cada árbol y otra es que no lleves nada esperando que te lo den todo.
Pues eso que acabé contenta porque a los visitantes les gustó mucho, el rato de la comida fue genial, pero no quita que esté un poco dolida con la actitud de algunos. Gracias además a los 3 socios que aunque no expusieron estuvieron a la hora de montar y recoger. Y a las parejas de algunos que echaron una mano.
Como este es mi espacio, me desahogo aquí, y ya sabe, al que no le guste que empiece a pensar lo que necesita para exponer correctamente el año que viene.
Un abrazo
Otros temas relacionados:
Pensando que bonsái exponer este año
Bonsái y fotografía: otra visión de la expo
El viernes me dediqué a preparar todo lo que tenía que llevar y cuando vi el espacio que ocupaba me preocupé.
Josean esta vez me mataba, tendría que hacer tetris.
Y ahí faltan las cajas con las mesas y demás complementos.
Una vez montado todo tal y como había preparado el planning de la expo, me puse a colocar lo mío, casi con todo terminado, hubo que hacer algún cambio de última hora.
En el photocall que montamos como bienvenida y como ya habéis visto, había una Fagus Crenata impresionante puse un papirus mini en una maceta de Martín.
En la primera peana coloqué una bola de musgo mía con una Imperata cilindrica "red baron" y una Fragaria indica, sobre una laja de pizarra.
Nadie quería estar en los primeros sitios porque según ellos son los que menos ven los visitantes, así que coloqué mis presentaciones.
En la primera y la única que tenía pensado llevar, si más socios hubieran participado, el carpinus coreánica, la premna japónica y una fragaria indica.
La segunda, el buxus harlandii, con el juniperus procumbens y de acento una saxífraga paniculata en maceta de Martín.
En la siguiente peana de separación, la heuchera en maceta de Martín, gustó muchísimo, todo el mundo preguntaba.
Mada, como ya he dicho, se encuentra en Viena de vacaciones, quería exponer su carpe y me lo traje a casa, el resto de la presentación es todo mío. Carpinus Betulus, con azalea Satsuki en maceta de Martín y de acento un sedum
Jonathan expuso su acer palmatum y le presté una siempreviva que conocéis de sobra, regalo de Martín, la maceta también es de él, la laja de madera es mía.
Toño expuso su cedro y le presté un kusamono, la planta regalo de Lourdes y la maceta de Martín.
También expuso Toño su pino silvestre y le dejé un helecho que tengo puesto en la maceta que me regaló Angel.
Y cerrando la exposición, en la última peana que tampoco quería ocupar nadie con algo suyo por si alguien tenía tentaciones de llevárselo, de nuevo algo mío, otra imperata cilindrica en maceta, como no, de Martín.
Hubo algunas mesas y lajas más, repartidas por la expo. De hecho en casa de todo lo que tengo solo se quedó una mesa. Ya les he dicho que no cuesta tanto ir pensando que se va a necesitar al menos con unos meses de antelación, que tener un kusamono o dos no ocupa lugar y que hay mesas muy caras pero también las podemos encontrar muy baratas, que no exponemos en la kokufu. Una cosa es llevar una o dos cosas de más y otra llevar más de la mitad para dejarlo a los demás, y menos mal que Ana llevó también algunos kusamonos extras.
Había dicho que no iba a llevar mas que lo justo y dos o tres cosas extras pero como quiero que las cosas queden bien al final voy siempre cargada. Llegué a casa agotada y un poco cabreada, tampoco es tan difícil intentar hacer las cosas bien, sobre todo cuando te las dan masticadas.
Sé que algunos socios no exponían porque no podían, pero de esos 15 que no expusieron gran parte fue porque no quisieron. Había decidido que este año no le insistiría a nadie si ellos decían que no, era no, si alguno estaba esperando que le suplicara su participación se equivocó. Y así otros socios que realmente no podían exponer realmente, viendo el panorama hicieron algo más que un esfuerzo para estar presentes.
No entiendo a los que no quieren exponer, no es un evento nacional es una exposición de asociación para que los visitantes puedan ver que el bonsái no es tan elitista como muchos se piensan, se trata de hacer esta afición más conocida, pero al final con no exponer cosas sencillas consiguen el efecto contrario, cargar de trabajo a otros y que se expongan árboles impresionantes que a los visitantes profanos les parecen imposibles de cuidar.
Y luego están los que piensan que hay que exponer sólo árboles que hayan pasado una selección, pero estamos locos?, somos una asociación, y es la exposición de todos los socios. Que no estamos hablando de exponer en Alcobendas o la Niemeyer, que ahí querría yo ver a algunos.
Olvidan que exponer un bonsái no es colocarlo sin más encima de un mantel y ya habrá alguien que me deje lo que yo necesito y lo siento una cosa es que entre unos y otros se cambien mesas o kusamonos para poner las más adecuadas con cada árbol y otra es que no lleves nada esperando que te lo den todo.
Pues eso que acabé contenta porque a los visitantes les gustó mucho, el rato de la comida fue genial, pero no quita que esté un poco dolida con la actitud de algunos. Gracias además a los 3 socios que aunque no expusieron estuvieron a la hora de montar y recoger. Y a las parejas de algunos que echaron una mano.
Como este es mi espacio, me desahogo aquí, y ya sabe, al que no le guste que empiece a pensar lo que necesita para exponer correctamente el año que viene.
Un abrazo
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